domingo, 11 de agosto de 2013

George R. R. Martin - Juego de tronos (Canción de hielo y fuego I)

Tras el largo verano, el invierno se acerca a los Siete Reinos. Lord Eddars Stark, señor de Invernalia, deja sus dominios para unirse a la corte de su amigo el rey Robert Baratheon, llamado el Usurpador, hombre díscolo y otrora guerrero audaz cuyas mayores aficiones son comer, beber y engendrar bastardos. Eddard Stark ocupará el cargo de mano del rey e intentará desentrañar una maraña de intrigas que pondrá en peligro su vida y la de todos los suyos. 
En un mundo cuyas estaciones duran decenios y en el que retazos de una magia inmemorial y olvidada surgen en los rincones más sombríos y maravillosos, la traición y la lealtad, la compasión y la sed de venganza, el amor y el poder hacen del juego de tronos una poderosa trampa que atrapará en sus fauces a los personajes... y al lector.



Eduardo Galeano - Patas arriba

Hace ciento treinta años, después de visitar el país de las maravillas, Alicia se metió en un espejo para descubrir el mundo al revés. Si Alicia renaciera en nuestros días, no necesitaría atravesar ningún espejo: le bastaría con asomarse a la ventana. Al fin del milenio, el mundo al revés está a la vista: es el mundo tal cual es, con la izquierda a la derecha, el ombligo en la espalda y la cabeza en los pies.

http://radiomacondo.fm/2013/04/27/patas-arriba-la-escuela-del-mundo-al-reves-eduardo-galeano/

Rubén Gallego - Blanco sobre negro

El autor y protagonista de esta impresionante narración es un hombre que no permitió que su minusvalía y la crueldad humana acallaran la voz de su inteligencia y su sensibilidad.

Rubén Gallego nació en Moscú en 1968, en la clínica del Kremlin. Ahí llevaron a su madre de urgencias gracias a la intervención de su abuelo, Ignacio Gallego, dirigente del Partido Comunista Español en el exilio. Nacieron mellizos, pero el primer bebé falleció a los pocos días. El segundo, Rubén, afectado de parálisis cerebral, vivió con su madre un año y medio, encerrado en un hospital. Luego se lo quitaron y le dijeron que había muerto.

Éste es el relato de su infancia y su juventud, de su supervivencia como presunto huérfano en siniestros orfanatos secretos y asilos en los que se confinaba a los familiares «no presentables» de los jerarcas comunistas, en una sociedad donde se ocultaba sistemáticamente todo aquello que fuera en contra del mito del hombre nuevo. Un país donde todo el mundo tenía la obligación de ser feliz.


«Escribo sobre la fuerza. Sobre la fuerza que se encuentra en cada uno de nosotros. Sobre la fuerza que rompe todas las barreras, sobre la fuerza que vence. Cada uno de mis relatos es el relato de una victoria.»